Faltan cosas por pulir

El 15 de noviembre comparé a Silva con Aimar. Entonces ya expliqué que una de sus principales diferencias es que Silva carece de las dotes organizativas de Aimar para jugar en el centro del campo pero que sin embargo es un jugador mucho mas resolutivo jugando cerca del área.

El cambio de sistema ha perjudicado notablemente a Silva. Está demasiado lejos, sus características mas destacables como la conducción o el último pase son inútiles desde posiciones tan atrasadas. El equipo le echa de menos unos metros mas arriba. A día de hoy Silva se encuentra desquiciado. Incapaz de encontrar su fútbol, pelea como el que mas y comete faltas innecesarias. El equipo también se resiente al no encontrar en Silva la consistencia, que es el primer valor de un medio centro.

Otro desajuste se produce en la delantera. Vicente y Joaquín se muestran, en su mejor versión como demasiado extremos para lo que necesita el Valencia. Esto aleja mucho a unos de otros y produce un vacío en el área rival la cual solo es pisada por Villa que se enfrenta habitualmente a los dos centrales. Villa sí echa mucho de menos la magia de su amigo canario. A falta de claridad de ataque, ese jugador que la para, que se va hacia el centro, que cambia de ritmo y mete el pase entre líneas es mas que nunca imprescindible.

La defensa tampoco se salvó del fuego en el partido contra el submarino. Albiol es un gran central complemento pero ha demostrado ser incapaz de liderar la zaga. Con Marchena en el mediocentro y Alexis lesionado, la pareja Albiol-Caneira era la mejor que se podía alinear pero fueron una vía de agua constante. Tal vez con la incorporación de Maduro al centro del campo (excelente fichaje) Koeman se sienta libre de ajustar a Marchena y a Albiol en la defensa. El Sevillano sí es un lider, sí se anticipa y sí puede convertirse en el primo de zumosol que proteja al equipo.